El triunfo de Yamamoto tuvo un aire histórico: se convirtió en el primer pitcher en lanzar un juego completo en la Serie Mundial desde 2015, una hazaña que resalta aún más en una era donde los relevistas suelen dominar las últimas entradas.
Su control impecable, mezcla de rectas veloces y rompientes precisos mantuvo desconcertada a la ofensiva canadiense durante todo el encuentro.
Los Dodgers, campeones defensores, respondieron a la derrota del Juego 1 con una ofensiva más agresiva desde el inicio. Mookie Betts y Freddie Freeman encabezaron el ataque, combinándose para tres carreras impulsadas, mientras que Will Smith aportó un doble crucial en el séptimo inning que amplió la ventaja angelina.
Toronto, que había brillado en el primer partido con un bateo oportuno, se vio limitado a apenas cuatro imparables y una sola carrera producto de un cuadrangular solitario de Vladimir Guerrero Jr. en la cuarta entrada, el único momento en que Yamamoto pareció titubear.
Con esta victoria, la Serie Mundial se traslada ahora a Toronto para el Juego 3, con la emoción al máximo y la serie igualada 1-1. Los Dodgers confían en que el dominio de Yamamoto marque el tono para recuperar el control del Clásico de Otoño, mientras los Azulejos buscarán aprovechar el impulso de su público local para volver a tomar la ventaja.

