By Rafael Castro 
Santo Domingo, RD.
En un emotivo y solemne acto, el Mayor General Piloto Floreal Suárez Martínez, comandante General de la Fuerza Aérea de República Dominicana (FARD), encabezó la ceremonia de imposición de las insignias “Media Ala de Piloto Aviador” a 18 jóvenes oficiales y estudiantes de aviación que alcanzaron un importante hito en su carrera: la realización de su primer vuelo en solitario, conocido como “soleo”.
El Comandante General, Mayor General de la FARD, Floreal Suárez Martínez destacó el esfuerzo de las diferentes direcciones de educación y entrenamiento de la FARD, que trabajan para garantizar que cada oficial reciba una formación integral, tanto en lo técnico como en lo ético, preparando a los futuros oficiales para operar aeronaves con altos estándares de seguridad y profesionalismo.
El acto estuvo marcado por el orgullo institucional y el simbolismo de la insignia “Media Ala de Piloto Aviador”, que acredita a los estudiantes haber completado satisfactoriamente la fase inicial de formación y los habilita para continuar con las etapas más avanzadas del entrenamiento de vuelo.
La imposición de estas insignias representa no solo un logro personal para los cadetes, sino también un compromiso de servicio y defensa de la nación.
Durante su discurso, el Mayor General Suárez Martínez felicitó a los estudiantes y resaltó la importancia del compromiso que asumen al portar el distintivo.
La actividad, realizada en la sede principal de la Base Aérea de San Isidro, contó con la presencia de altas autoridades militares de la institución, entre ellos el general de brigada piloto Manuel García Lithgow, Subcomandante General de la FARD; el general de brigada Euler Sierra Pérez, Inspector General
Tambien el general de brigada piloto Héctor Martínez Pérez, director de la Dirección de Educación, Capacitación y Entrenamiento (DECEFARD); y la teniente coronel piloto María Tejada Quintana, directora de la Dirección de Formación y Capacitación Aeronáutica (DIFOCAA). Oficiales superiores, cadetes, clases y alistados también asistieron para acompañar a los nuevos pilotos en esta significativa ceremonia.
La imposición de estas insignias representa no solo un logro personal para los cadetes, sino también un compromiso de servicio y defensa de la nación.
“Llevar en el pecho esta insignia los compromete aún más a continuar su capacitación como pilotos aviadores, pero, sobre todo, como miembros de las Fuerzas Armadas, para garantizar la soberanía de nuestro cielo”, expresó.
La ceremonia concluyó con una demostración aérea y un recorrido por las instalaciones de entrenamiento, donde los familiares de los cadetes pudieron conocer más de cerca el proceso de formación que siguen los futuros pilotos militares de la nación.